00:00:03 Internet of Things (IoT) y las cámaras inteligentes de China.
00:01:05 El bajo costo de la potencia de cómputo posibilita el IoT en objetos cotidianos.
00:02:24 Impactos del IoT: mejorar la funcionalidad de los dispositivos y de la supply chain.
00:04:47 El rol del IoT en la gestión global de supply chain.
00:07:02 Dispositivos IoT baratos: suministro de energía y modos de reposo.
00:09:46 Desafíos de integración de datos del IoT en sistemas ERP.
00:11:28 Amazon superando los desafíos relacionados con los datos del IoT.
00:13:27 Futuro: actividades automatizadas con IoT, por ejemplo, Amazon Dash Button.
00:13:38 Desafíos de adopción del IoT: seguridad y riesgos de creación de botnets.
00:16:02 La dificultad de los servidores para diferenciar solicitudes humanas de las de máquinas.
00:17:12 Dispositivos IoT: objetivos atractivos para los ciberdelincuentes.
00:17:49 Soluciones de seguridad del IoT: auditorías de código, programas de recompensas para hackers.
00:20:55 Futuro del IoT: vehículos autónomos, logística de supply chain.
00:25:17 Cambios organizacionales/IT para un mayor uso del IoT.
Resumen
En una entrevista en Lokad TV, Joannes Vermorel, fundador de Lokad, conversa con Kieran Chandler sobre la creciente prevalencia e implicaciones de la tecnología Internet de las Cosas (IoT). Vermorel destaca el potencial del IoT para revolucionar la gestión de supply chain mediante el seguimiento en tiempo real de activos y la monitorización ambiental. Además, reconoce la asequibilidad y eficiencia energética de los dispositivos IoT, a la vez que advierte sobre los significativos desafíos en la gestión de datos y la seguridad que pueden presentar. Vermorel menciona a Uber y Amazon como empresas que están utilizando el IoT con destreza, con el seguimiento de conductores de Uber y las operaciones inteligentes de supply chain de Amazon. De cara al futuro, prevé un aumento en la trazabilidad impulsada por el IoT, a pesar de los obstáculos de implementación en IT y en las estructuras organizativas.
Resumen Ampliado
En el último episodio de Lokad TV, el presentador Kieran Chandler y el invitado Joannes Vermorel, fundador de Lokad, exploran el tema del Internet de las Cosas (IoT). Vermorel analiza la presencia cada vez mayor de dispositivos IoT en nuestro mundo interconectado, una tendencia impulsada en gran medida por la reducción del costo del poder de cómputo. Esta asequibilidad permite la integración de computadoras en casi cualquier objeto sin un aumento considerable en el precio.
Vermorel se refiere a autos, dispositivos de control de la temperatura de tu hogar, cámaras IP y dispositivos inteligentes para el hogar como Amazon Echo, como ejemplos de objetos que pueden adquirir capacidades IoT. Afirma que estas mejoras hacen que los objetos sean más versátiles, con funciones como la autodiagnosis y la conectividad en red, allanando el camino para un mantenimiento más inteligente de los objetos, reparaciones preventivas y un uso simplificado.
Gran parte de su conversación se concentra en el posible impacto del IoT en la gestión de supply chain. Vermorel sugiere que el IoT puede desempeñar un papel vital en el seguimiento y la monitorización de mercancías desde la fabricación hasta su destino final. Esto puede ayudar a abordar desafíos clave de supply chain, como coordinar una gran cantidad de activos en movimiento a lo largo de amplias áreas geográficas.
Al integrar el IoT en objetos como pallets o paquetes, Vermorel señala que es posible el seguimiento en tiempo real, lo que permite una mejor gestión de los activos. Además, el rol de los dispositivos IoT en los procesos de supply chain va más allá de simplemente rastrear la ubicación de los objetos. Los sensores IoT pueden capturar y transmitir datos ambientales, como la temperatura y la aceleración, garantizando la seguridad de las mercancías y monitorizando su estado durante el transporte.
La asequibilidad y la eficiencia energética de los dispositivos IoT es otro tema clave de su discusión. Vermorel ilustra cómo la disminución de los costos de cómputo hace viable añadir tales funcionalidades a casi cualquier objeto. El costo de embedding una computadora completamente funcional, con capacidades de internet, en un producto podría ser de tan solo un dígito, convirtiendo a los dispositivos IoT en artículos prácticamente consumibles dentro de la supply chain. Vermorel explica que los dispositivos IoT, aprovechando los avances de la tecnología móvil, pueden conservar energía al entrar en modo de reposo cuando no están procesando o transmitiendo datos activamente. Estos dispositivos pueden funcionar durante uno o dos años con su batería, eliminando la necesidad de energía externa. Se pueden considerar desechables, con la eliminación y reciclaje al final de su vida útil integrados en su ciclo de vida.
También analizan el desafío de integrar los datos producidos por microprocesadores en los sistemas ERP. Vermorel reconoce que los dispositivos IoT generan una cantidad masiva de datos. Aunque cada dispositivo produce una pequeña cantidad de manera individual, el volumen agregado de muchos dispositivos es sustancial, lo que requiere nuevas estrategias de IT, como bases de datos NoSQL y capacidades de big data para un procesamiento efectivo de datos.
Vermorel menciona a Amazon como una empresa que ha abordado con éxito este problema. Elogia la estrategia a largo plazo de Jeff Bezos y la arquitectura orientada a servicios de Amazon. La adquisición de Kiva Systems, una empresa especializada en la automatización de almacenes mediante robótica, y el lanzamiento de los botones Amazon Dash, demuestran el uso innovador del IoT por parte de Amazon.
Vermorel identifica luego la seguridad como un desafío significativo para la adopción del IoT, junto con la gestión de datos. Afirma que los dispositivos IoT son más susceptibles a ser hackeados que los ordenadores convencionales de centros de datos, lo que podría resultar en que estos dispositivos sean comprometidos e incorporados en una botnet para ciberataques. Utiliza las cámaras IP como ejemplo, ya que son hackeadas con frecuencia y se utilizan para crear algunas de las botnets más grandes.
A continuación, Vermorel introduce el concepto de botnets a la audiencia. Controladas por criminales, las botnets pueden emplearse para diversas actividades maliciosas, siendo los ataques de denegación de servicio los más comunes. Estos ataques utilizan la botnet para saturar un sitio web con tráfico, bloqueando el acceso a los usuarios legítimos. Los grupos criminales suelen explotar esto como un método de extorsión, ofreciendo detener el ataque a cambio de un pago. Los dispositivos IoT, debido a su seguridad débil y conectividad a internet, son objetivos privilegiados para tales ataques.
La complejidad de asegurar los dispositivos IoT es el siguiente tema que aborda Vermorel, comparando este desafío con las brechas de seguridad experimentadas por empresas establecidas como Intel. Al no existir una solución que se ajuste a todos, Vermorel enfatiza la importancia de realizar auditorías regulares del código fuente y pruebas de estrés en los dispositivos para identificar vulnerabilidades. Sugiere que los “bounty programs” de los proveedores de tecnología podrían incentivar a los hackers “white hat” a descubrir y reportar posibles brechas, mejorando así la seguridad en general.
Vermorel luego se dirige al potencial y los desafíos del IoT. Él vislumbra un futuro prometedor, reconociendo los obstáculos existentes. Menciona que Uber, por ejemplo, ya utiliza el IoT a gran escala, rastreando la posición de cada vehículo en su red a través de los smartphones de los conductores, lo que proporciona a su sistema de despacho un control y eficiencia extensos.
Vermorel también enfatiza la transición de Uber hacia una red de vehículos autónomos. Anticipa que, una vez que los vehículos autónomos se generalicen, Uber operará esencialmente como una extensa red IoT que controla activos en movimiento. Añade que los camiones autónomos están empezando a aparecer, con Uber lanzando la primera línea de camiones completamente autónomos en EE. UU.
La discusión concluye con un enfoque en la trazabilidad de la supply chain, donde Vermorel ve el IoT como una herramienta poderosa. Puede ofrecer actualizaciones en tiempo real y trazabilidad completa, crucial para industrias que manejan mercancías de alto valor como electrónica de consumo, artículos de lujo o vacunas. Vermorel reconoce a Amazon como pionero en el uso del IoT para las operaciones de supply chain, añadiendo agilidad y flexibilidad al proceso.
Al aprovechar los conocimientos en tiempo real hasta el nivel de pallet, Vermorel sugiere que las empresas pueden tomar decisiones inteligentes e instantáneas, como redirigir una entrega en curso debido a una necesidad repentina. Aunque predice que estas aplicaciones están en el horizonte, advierte que implementar cambios en IT y en la estructura organizativa para acomodar nuevos métodos operativos podría presentar desafíos significativos. Sin embargo, asegura que, si se implementan correctamente, es poco probable que ocurra un scenario distópico al estilo de “Black Mirror”.
Transcripción Completa
Kieran Chandler: En el episodio de hoy, vamos a discutir dispositivos cotidianos que, cuando se conectan a Internet, se vuelven inteligentes. Estos se conocen bajo el título algo ambiguo de Internet de las Cosas. Hoy en día, vivimos en un mundo verdaderamente interconectado donde la cantidad de dispositivos que incorporan software y sensores parece crecer día a día. Este aumento en la conectividad, sin duda, tiene sus beneficios. Por ejemplo, en Shenzhen, China, la instalación de 40.000 cámaras inteligentes en la ciudad redujo la tasa de criminalidad en más del 50%. Sin embargo, estos dispositivos cotidianos pueden ser hackeados. En el mejor de los casos, los hackers podrían estar utilizando el dispositivo para obtener información para campañas publicitarias dirigidas. En el peor de los casos, estas vulnerabilidades pueden ser utilizadas para ataques a nivel de servicio que, en el pasado, se han empleado para derribar los sistemas bancarios de países enteros, como ocurrió en Estonia en 2007. Entonces, Joannes, con una palabra de moda como “Internet of Things”, suena muy vago. ¿Quizás podemos empezar con un ejemplo?
Joannes Vermorel: Sí, absolutamente. El Internet de las Cosas es simplemente una tendencia de que la potencia de cómputo se abarate con el tiempo. Hace un par de años, se volvió lo suficientemente barato como para tener una computadora en el bolsillo, es decir, tu smartphone. La tendencia aún continúa, y ahora se ha vuelto tan económico que en realidad puedes colocar una computadora en casi cualquier cosa. Y para muchos objetos que ya no son súper baratos, apenas cambiará el precio de ese objeto. Por ejemplo, podemos poner computadoras en autos, que son bastante caros, por lo que ya pueden contener literalmente docenas de microprocesadores y potencia de procesamiento inteligente. También podemos instalarlas en dispositivos que controlan la temperatura de tu hogar, en cámaras IP que solo requieren una conexión a internet para subir su transmisión de video a un servicio en línea de tu elección. Más recientemente, hemos visto una tendencia con dispositivos inteligentes como Amazon Echo, donde simplemente puedes decir un comando de voz en voz alta, como “buy me this song”, y procederá directamente a tomar el pedido y procesarlo.
Kieran Chandler: Si lo vemos desde una perspectiva humana, ¿cómo está cambiando realmente esta tecnología la forma en que interactuamos con estos objetos?
Joannes Vermorel: Creo que puede hacer que los objetos sean más capaces en muchos sentidos. Pueden tener capacidades de autodiagnóstico, de modo que si deseas realizar una reparación, muchos objetos pueden proporcionar un diagnóstico legible en caso de que algo salga mal. Por ejemplo, la mayoría de las impresoras mostrarán el problema directamente en la impresora. Actualmente, la mayoría de las impresoras se pueden conectar a una red, y luego, quien tenga acceso a esta red local puede imprimir sin necesidad de conectar la impresora a la computadora. La misma lógica se puede aplicar a las máquinas de café empresariales, que podrían requerir reparaciones. Estas máquinas son capaces de autodiagnosticarse y activar una operación de mantenimiento por sí mismas en lugar de esperar a que ocurra el problema. No se trata solo de objetos que ya estaban alimentados y que pueden ser aumentados con capacidad IoT. Desde una perspectiva de supply chain, podemos añadir capacidades IoT a objetos que normalmente no son autoalimentados, como pallets o paquetes, simplemente para disponer de mejores sistemas de seguimiento que puedan enviar información directamente a la sede sobre el estado de ese objeto en particular.
Kieran Chandler: Entonces, has mencionado pallets, paquetes y camiones, lo que se ve desde una perspectiva de supply chain. ¿Dónde ves el verdadero potencial para las supply chain con el Internet de las Cosas?
Uno de los mayores desafíos de las supply chain es lidiar con un mundo inmenso, con numerosos activos en movimiento que deben satisfacer las necesidades de los clientes. Es muy difícil tener una coordinación precisa, incluso en tiempo real, de todo a escala global. Por ello, el IoT ofrece la posibilidad de un seguimiento activo en cada pallet, camión o paquete, de modo que sepamos exactamente dónde se encuentran y por dónde han transitado durante todo su ciclo de vida.
Joannes Vermorel: Sí, no se trata solo de conocer la ubicación. Cuando añades un rastreador IoT, puedes monitorear la temperatura para saber si ésta se ha controlado durante toda la duración del transporte. Puedes medir la aceleración con un acelerómetro para saber si tus mercancías han sufrido golpes que podrían dañarlas. También puedes disponer de medidas de seguridad inteligentes para monitorear la integridad física de un precinto, y así asegurarte de que lo que se transporta no haya sido manipulado. Estas capacidades ya se utilizan hoy en día con métodos simples y menos tecnológicos, pero con el IoT volviéndose súper barato, la pregunta es: ¿qué puedo hacer con esta computadora que puedo instalar en prácticamente todo?
Kieran Chandler: Eso es fascinante. Pero algo que realmente me falta aquí es, ¿de dónde proviene la energía externa para estos microprocesadores y microcomputadoras que se colocan en cada uno de tus pallets? ¿No necesitan cargarse?
Joannes Vermorel: Es una buena pregunta. Existe un truco muy ingenioso que se ha heredado del progreso logrado en los teléfonos móviles. Tu dispositivo IoT no necesita estar encendido todo el tiempo. Puede entrar en modo de reposo y luego despertarse, digamos, una vez por minuto, realizar algún procesamiento durante una décima de segundo, enviar un pulso a través de la red y luego volver a dormir. Al hacer esto, puedes conservar la energía de tu batería durante un período mucho más largo. Los dispositivos IoT modernos, si no les exiges demasiado, pueden durar uno o dos años.
Kieran Chandler: Entonces, si tu dispositivo cuesta apenas un par de dólares y deseas rastrear algo relativamente caro, el dispositivo IoT se convierte en un consumible. Lo sacas de la fábrica, baterías incluidas, tendrá una vida operativa de, digamos, dos años, y luego, al final de su vida, simplemente lo desecharás para su reciclaje. Pero, ¿no resulta eso un poco derrochador? El medio ambiente es hoy en día una consideración sumamente importante.
Joannes Vermorel: Como muchas cosas, los supply chains consumen muchos consumibles, incluido todo ese embalaje que se necesita para rodear los productos y evitar que se rompan. Estos también son consumibles que deben reciclarse. La electrónica de consumo, en general, es bastante fácil de reciclar. Además, estamos hablando literalmente de gramos de materiales, por lo que es muy ligero. Por lo tanto, el impacto ambiental es muy leve, simplemente porque es tan pequeño, tan ligero, y si se hace correctamente, se puede reciclar casi en su totalidad.
Kieran Chandler: Entonces, hablemos de los datos que están produciendo estos microprocesadores. ¿Podrías comentar cómo se podrían implementar las tecnologías IoT en los sistemas ERP existentes?
Joannes Vermorel: De hecho, implementar IoT en los sistemas ERP existentes es uno de los mayores desafíos. Una flota IoT puede generar una cantidad masiva de datos. Cada dispositivo en sí mismo podría no generar gigabytes de datos, pero debido a la gran cantidad de dispositivos, los datos agregados son, en general, inmensos. Generalmente, es una o dos órdenes de magnitud mayor que los datos transaccionales típicos que se recogían históricamente a través de un ERP.
Esto requiere diferentes estrategias de TI para el procesamiento, como el movimiento NoSQL. Las bases de datos NoSQL pueden procesar muchos más datos de una manera mucho más escalable. Típicamente se necesita algún tipo de capacidad de big data para agrupar y procesar todos estos datos generados por IoT. No encaja de forma natural en la arquitectura histórica de tu mundo ERP transaccional. Requiere un soporte extenso del departamento de TI para implementar todos los componentes necesarios, típicamente en la computación en la nube, para sostener la flota IoT en el terreno.
Kieran Chandler: ¿Existen compañías que hayan superado con éxito este obstáculo relacionado con los datos?
Joannes Vermorel: Sí, la hay. Amazon, por ejemplo, ha sido pionera en este campo. El pensamiento a largo plazo de Jeff Bezos ha sido impresionante. En 2002, emitió un famoso memorando impulsando a Amazon hacia una arquitectura orientada a servicios. Esta es una buena opción si se necesitan servicios dedicados a la transmisión escalable de eventos, similar a lo que se requiere con una flota IoT. También adquirieron Kiva Systems, que esencialmente hace uso de IoT al permitir el rastreo de cientos de robots operando en almacenes.
Amazon incluso está expandiendo los límites de la supply chain con el Dash Button. Este dispositivo, que puedes comprar en Amazon y pegar en tu refrigerador, te permite pedir cantidades adicionales de un producto con solo presionar un botón. Están haciendo cosas muy agresivas con IoT en la actualidad, aunque todavía hay muy pocas compañías que se mueven en esa dirección.
Kieran Chandler: Es una perspectiva interesante que, en el futuro, en lugar de hacer la compra en el supermercado, pueda simplemente abrir mi refrigerador, presionar algunos botones y recibir todo en casa. Aparte de los datos, ¿existen otros obstáculos que impidan la adopción de IoT?
Joannes Vermorel: Sí, después de actualizar tu infraestructura de TI para soportar los datos adicionales, el segundo mayor desafío es la seguridad. Los dispositivos IoT están fundamentalmente en riesgo, mucho más que las computadoras que se encuentran en un centro de datos bien protegido. Los dispositivos IoT pueden ser hackeados. De hecho, las botnets más grandes que causan estragos en Internet están formadas por cámaras IoT hackeadas, utilizadas por criminales para llevar a cabo ataques.
Entonces, para las compañías de supply chain que desean adoptar IoT para actualizar su supply chain, la segunda mayor preocupación sería implementar una defensa en profundidad para asegurar que su flota de dispositivos no sea hackeada y utilizada con fines destructivos en el mundo digital o real.
Kieran Chandler: El propósito de introducir todos estos dispositivos inteligentes en la red se siente un poco demasiado cercano a la trama de Black Mirror. ¿Podrías definir para nuestros espectadores a qué te refieres con “botnet”?
Joannes Vermorel: Una botnet, en términos simples, es cuando se tiene acceso a un gran número de computadoras, digamos un millón, y se pueden utilizar para hacer cosas en Internet. Sin embargo, generalmente no son cosas buenas.
Kieran Chandler: ¿Puedes darnos algunos ejemplos? ¿Quién está haciendo esas cosas hoy en día?
Joannes Vermorel: Esto lo realizan en su mayoría grupos de crimen organizado. Pueden tomar el control de estas máquinas y usarlas para beneficiarse de su conexión a Internet. Por ejemplo, pueden conectarse a sitios web y descargar páginas de inicio. La parte complicada es que, desde la perspectiva de un sitio web, es difícil diferenciar entre una persona real y una máquina que realiza dichas solicitudes.
Kieran Chandler: Entonces, ¿es una máquina la que descarga la página web y no la persona en sí?
Joannes Vermorel: Exactamente. Si un criminal tiene acceso a un millón de máquinas, todas pueden solicitar una página web al mismo tiempo, creando un ataque de denegación de servicio. El sitio web se sobrecarga y nadie más puede acceder a él. Luego, el grupo criminal ofrecerá sus servicios de “protección” para evitar el problema, casi como un rescate.
Kieran Chandler: ¿Parece que estos criminales están explotando dispositivos de Internet de las cosas (IoT)?
Joannes Vermorel: Correcto. Los dispositivos IoT son objetivos principales porque a menudo tienen una seguridad laxa pero cuentan con conectividad a Internet. Esto los hace perfectos para formar botnets. Sin embargo, son posibles ataques aún más severos.
Kieran Chandler: Antes de profundizar demasiado en los métodos de hackeo, ¿podrías explicar cómo podemos asegurar estos dispositivos?
Joannes Vermorel: Asegurar estos dispositivos es un problema complejo. Incluso compañías consolidadas como Intel han tenido fallas de seguridad en sus CPUs. Por ejemplo, las fallas Specter y Meltdown que se descubrieron este año habían estado presentes durante aproximadamente dos décadas sin ser detectadas. Sin embargo, existen algunas medidas básicas para garantizar la seguridad.
Kieran Chandler: ¿Cuáles son estas medidas básicas?
Joannes Vermorel: Primero, es necesario auditar el código fuente. Las personas deben intentar vulnerar la seguridad del dispositivo. Si no pueden, eso es una buena señal. Sin embargo, sin que alguien intente vulnerarlo, nunca podemos estar completamente seguros de la seguridad del dispositivo. Muchos proveedores de tecnología ofrecen programas de recompensas en los que pagan a individuos que logren encontrar y demostrar brechas de seguridad. Esto incentiva a los “good guy hackers”, los hackers de sombrero blanco, a hacer estos sistemas más seguros.
Kieran Chandler: Has mencionado incentivos para que las buenas personas ayuden a asegurar tus implementaciones de IoT. Es un tema multifacético sin una solución simple, pero invertir en seguridad es definitivamente un requisito previo. Estoy particularmente intrigado por la idea de tener “good guy hackers”. Ahora bien, IoT definitivamente parece tener mucho potencial, pero también parecen existir muchos obstáculos por superar. ¿Cómo ves que se desarrollen las cosas en el futuro cercano? ¿Crees que estos dispositivos serán algo que usemos a diario para el próximo año? ¿Cómo imaginas el futuro de IoT?
Joannes Vermorel: El futuro ya está aquí en muchos aspectos. Por ejemplo, considera lo que hace Uber. Ellos están utilizando IoT a gran escala con conductores humanos, ya que todavía no cuentan con vehículos autónomos. En términos de la supply chain, utilizan rastreadores IoT, que son los smartphones de sus conductores. Ni siquiera necesitan pagar por el dispositivo IoT, ya que los conductores ya los tienen e instalan la aplicación. Uber rastrea la ubicación de cada vehículo, lo cual es un activo de la red de Uber. Tienen este sistema de control integral en el que pueden despachar la demanda a los conductores más cercanos e incentivar a que estén presentes en determinados momentos y lugares. Así que, para mí, Uber ya es como una red IoT.
Lo mismo está ocurriendo con los camiones autónomos. Uber inauguró la primera línea de camiones completamente autónomos que recorrió los Estados Unidos. Así que, creo que en los próximos años veremos muchos avances en torno a los vehículos autónomos y la trazabilidad. La trazabilidad no se trata solo de prevenir falsificaciones, sino también de garantizar la integridad de tus productos a lo largo de toda la supply chain. IoT nos brinda la capacidad de rastrear cada contenedor, cada palé, cada caja, siempre y cuando lo que se transporta tenga algún valor. Esto es especialmente relevante si se realizan seguimientos de elementos como vacunas, electrónica de consumo, productos de lujo, etcétera. Es beneficioso para garantizar que toda tu cadena sea segura, que se preserve la integridad, y que dispongas de trazabilidad completa e información actualizada en tiempo real sobre todo lo que ocurre dentro de tu supply chain.
Las empresas inteligentes, como Amazon, están a la vanguardia, pero enfrentará competencia. Estas compañías aprovecharán los insights en tiempo real, hasta la ubicación de cada palé, para hacer sus operaciones de supply chain más inteligentes. Se volverán más ágiles, capaces de cambiar los planes a mitad de una entrega en respuesta a situaciones emergentes. Por ejemplo, en el sector aeroespacial, si surge un problema de “aircraft on ground”, una alerta en tiempo real puede desencadenar la redirección de un envío que ya está en curso. Creo que estos desarrollos están en el horizonte. Los desafíos más significativos probablemente serán implementar los cambios en TI y realizar cambios organizativos para aceptar estas nuevas formas de operar la supply chain.
Kieran Chandler: Eso suena prometedor, siempre y cuando se implemente correctamente y no acabemos en un escenario distópico al estilo de “Black Mirror” en el futuro cercano. Gracias por otra discusión fascinante. Volveremos la próxima semana con otro episodio más. Hasta entonces, nos vemos pronto. Adiós.